“Habitar desde la biomímesis” fue el tema central de nuestra primera mesa redonda Metanoia para hablar sobre nuestro habitar en el planeta y las posibilidades que entrega el imitar a la naturaleza, para poder regenerar nuestros entornos urbanos.
Contamos con la participación de tres increíbles expositores, Alexandra Guerra del Instituto Jane Goodall Chile, Gabriel Orrego de Symbiótica y Daniela Torres de Fundación Fungi, moderados por nosotros y de los que tuvimos la posibilidad de aprender mucho.
Tenemos que potenciar un cambio generacional, ser agentes de cambio. El llamado es a la acción y esa acción es ahora
Alexandra Guerra, JGI Chile
Como Metanoia, queríamos proponer una reflexión en base a considerar la biomímesis desde lo más profundo, sobre cómo nos relacionamos como especie, entre nosotros y con nuestro hábitat, más allá del diseño, tecnología o construcción que podemos encontrar basada en la naturaleza. Y analizar qué opciones vemos a partir de ahí, para adaptarnos a los desafíos actuales que vive nuestra sociedad y el planeta con el cambio climático.

Daniela Torres nos contaba del mundo de los hongos, de cómo sólo conocemos un 5% de ese mundo y que aún siendo un porcentaje pequeño, ahí radican muchas soluciones importantes que han acompañado a la humanidad en su historia, como con la penicilina por ejemplo. Y comentaba que “el cambio climático es algo que ya está aquí, no algo que va a pasar. Si los hongos se toman en cuenta, podemos llegar a una forma más cíclica de habitar. Hay que dejar que las cosas se pudran. Dejar que nuestra sociedad se transforme, eso no es el fracaso, eso es vivir. Así le damos pie a los nuevo procesos”.
Para Gabriel Orrego, hay mucha inspiración en los bosques y en el proceso de revegetación, en cómo las semillas viajan con el viento y llegan a un lugar para empezar a formar suelo. Para él “el daño peligroso de vivir en las ciudades es perder el honrar a la naturaleza, desconectarse” y nos recuerda que “la resiliencia es un factor de éxito y que también tiene que haber coherencia en la biodiversidad”.
“Podríamos hablar de balance en todos los reinos que están presentes en esta conversación. En el mundo animal, hay un balance perfecto en cómo comparten unos con otros, sin pasar a llevar a los ecosistemas” decía Alexandra Guerra y explicaba que en la naturaleza existe un cohabitar respetuoso, que el mundo animal nos recuerda que somos seres inteligentes, con lugar y tiempo determinados, y debemos conectarnos con esa sabiduría.
En Metanoia compartimos la visión de Alexandra cuando dice que “la ciudad también tiene mucho para sorprender, pero tenemos que reconectarnos con que somos naturaleza. Tenemos que potenciar un cambio generacional, ser agentes de cambio. El llamado es a la acción y esa acción es ahora”.
Estamos muy contentos de haber contado con más de 70 participantes que se mantuvieron atentos durante las casi dos horas de conversación, con interesantes preguntas y comentarios.
Esperamos con ansias volver a encontrarnos para seguir aprendiendo en conjunto.
¡Gracias a todos por su apoyo y colaboración!